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Poemas
de Berónica Palacios Rojas
¡Me
hablas!
¿Por qué no te veo?
¡Me gritas!
¿Por qué no existes?
Hacer poesía vivencial parece fácil (“mi
niñez es un eco lejano”) decir lo que nos tortura (“Me torturas cuando
estás ausente”), nos da placer (“Y esa lengua sedienta/baja por el río
de tu cuerpo”) lo que rechazamos (“prefiero vomitar esta aspereza/que
como hiel destilo”); lo que disfrutamos (“Saborear la fruta robada de
algún huerto”) nuestros ángeles (volvemos a Venus/y recorremos/una a una
las estrellas”) nuestros demonios (“Ella es apetito del instinto de la
noche”) para intentar hacer esto Bero tiene oficio y talento; para
hacer Poesía, esto es el filtro por donde pasan las imágenes de nuestra
vida, filtro que deja pasar lo que desea compartir y no caer en el lugar
manoseado y a partir de eso inventa su memoria, aquí lo trascendente es
que al principio parece que lo que escribe es ella, después sí es
ella... somos nosotros, en este juego de ponerse y quitarse máscaras
van surgiendo diferentes realidades, esto es lo que se le llama juego de
realidades, de no saber dónde termina una realidad y empieza la otra,
sin embrago, finalmente Bero hace una unidad Poética, las abstracciones
parte de su realidad casera, este proceso para abstraer es donde
interviene su oficio y su talento, de modo que finalmente es ella
verdadera en la dimensión literaria... realidad omnímoda; en este
intento se quedan muchos, porque además de las virtudes se necesita
paciencia y mucho esfuerzo. La Poesía de Bero es como un conjunto de
estrellas: vamos hacia ellas y entre más nos acercamos vemos menos de
ellas, cuando llegamos entre ellas no hay nada, sin embargo ahí están.
Imágenes poéticas como luces de estrellas candentes, esto es lo que
brota en la poesía de Berónica: vida candente, sulfurando vitalidad
(aquí cito a Azorín:”para escribir bien, lo que ante todo se requiere es
infundir vida en lo escrito y que esa vida pueda infundirla, con todos
esos vocablos vitales, que los puristas condenan... He dicho alguna vez
que el estilo es cosa vital y no meramente formal...” en mi caso como
organizador de encuentros literarios tengo que leer muchos textos y
muchos escriben buscando la imagen... depurando el lenguaje.. imitando a
los maestros de generaciones pasadas. Bero Transparenta sus vivencias
aplicando una técnica para destilar su esencia a través de metáforas,
imágenes poéticas que deslumbran y cimbran al lector y sólo deja ver
algunos rasgos de un molino existencial. Para Transparentar
literariamente nuestro ser, antes necesitamos recorrer un largo camino
de vivencias...conocimientos...
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El viernes 22
de septiembre, a las 19.30 hrs, en el Centro Cultural Atarazanas, ubicado
en Julio S. Montero esq. Esteban Morales, Centro Histórico, se
presentará este libro al público que inicia el Ciclo: Escritores de la
República en el estado de Veracruz, el proyecto es promover otros
libros, otras revistas, otros autores que no tienen suficientes espacios
de difusión, ellos vendrán y nosotros iremos, labor fraterna de
compañeros; para esto nos organizamos como Asociación Civil, formamos el
Comité Nacional de Encuentros
Literarios y nos
inauguramos organizando el 1o Encuentro Nacional de Escritores en
Tuxtepec, Oax., en junio del presente año. En este ciclo, apoyado por Néstor
Andrade, Director del Centro Cultural, en cuanto al espacio, cada mes
nos visitará un escritor que compartirá y le compartiremos lo producido
por nuestro oficio de creadores culturales.
Berónica Palacios
Rojas es originaria de
Chapala,
Jal. Licenciada
en Letras Hispánicas,
ha publicado en
la sección cultural de el Informador, El Financiero,
en las Revistas
Literarias Ecos del Lago
(Chapala),
“La Partera” de S. L. P.,
“Va de Nuez” de Nogales. En Guadalajara,
“Orfeo”, “Reverso” “Humanidades” “Rémora”,
“Arsbélico” Publicó dos Plaquetts: -Nostalgias- y -Herencias- en Signos/Edithec
de Zamora Mich. 2003. Esta antologada en “Poesía de raíces Mágicas”
anuario de la Cultura Mixteca, 2004,
México, D. F. Como
Promotora dirige la Revista de creación cultural “PAPALOTZヘ de
Guadalajara, Jal.
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maestros, así cada quien elige su camino: vivenciales... académicos...
seguidores de tendencias... y a mí me gustan los poetas vivenciales
porque me dicen más de ellos... de la humanidad... de mí: con la poesía
de Bero afirmo mi sentido de ser ante mi grupo, ante mi pareja, ante
mí.(“-expiro alegrías en cada una de mis manchas- -y ese dolor
pedregoso vuelve/como un eterno y pausado suspiro- -Despide un erótico
brebaje/ que bebe satisfecho el amante-” ) Todos los poetas hablan del
amor, sexo, lágrimas, soledad pero no todos hablan de su amor, de su
sexo, lágrimas, soledad, hablan en general, como estudiosos de la
personalidad ajena, muchos quieren descubrir y pocos pueden sentir,
parten de una imagen imaginaria de sí mismos y Bero vislumbra que
nosotros no somos las sombras que corren tras una ilusión sino chispas
de luz rodando sobre caminos terrenales.
“Y muy lejos
en la oscuridad del cielo, distingo destellos
parecidos a los chispazos del basurero”
Reynaldo Carballido
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