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								Adláteres migrantes   
								
								Adlátere (Minion)  
								
								Noun. A servile follower or subordinate of a 
								person in power  
								
								Diccionario Enciclopédico Vox 1. © 2009 Larousse 
								Editorial, S.L.   |  
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								| 
								 I 
								got Myself, óleo sobre tela. |  |    
						
						
						Yo viví la migración. Por cuestiones de oportunidades de 
						trabajo de mi esposo emigramos de la ciudad de México a 
						los Estados Unidos, específicamente a un suburbio al 
						oeste de Chicago. Somos afortunados de haberlo hecho sin 
						alguna premura causada por alguna guerra, violencia, 
						secuestro o problema familiar; lo hicimos porque vimos 
						en esta experiencia una gran oportunidad para expandir 
						nuestra percepción del mundo y conocer otras realidades 
						que en él toman lugar. En nuestra percepción, los 
						Estados Unidos es un país multicultural, la gente es muy 
						diversa en costumbres y tradiciones, existe un amplio 
						abanico de experiencias culinarias así como de 
						expresiones artísticas. Todo ello nos pareció de lo más 
						atractivo.  
						
						Aunque el momento 
						en que se dio el cambio no pudo ser más idóneo, no 
						pudimos evitar el azaroso proceso que implica 
						trasformación, desprendimiento y ruptura que la palabra 
						migrante representa: sales de un espacio que te 
						contiene, con el que te identificas y te protege. Es 
						claro que se pierde algo de ti mismo, de tu rutina, hay 
						un miedo a ser una especie de fantasma de lo que era tu 
						propia vida. Esa enquistada sensación hace que uno se 
						aferre a lo que realmente se considera importante 
						llegando a la inevitable conclusión que nos revela que 
						dentro de nuestra mente y de nuestro corazón portamos 
						nuestros recuerdos y su valor tangible son los objetos 
						simbólicos que nos representan todo. Así, con solamente 
						2 maletas cada quien, elegimos lo que podría ser 
						indispensable y alimentar el espejismo de no sentir que 
						lo perdíamos todo. ¿Qué cabía y qué debía traer conmigo 
						en este éxodo?   
						
						
						Desde nuestra llegada ejercí mi profesión, he pintado y 
						mucho; soy afortunada de poder prescindir de la 
						necesidad de un trabajo dentro de una empresa o algún 
						tipo de empleo no necesariamente relacionado con mi 
						profesión para desarrollarme aquí en los Estados Unidos. 
						Además de pintar, decidí enfocarme en mejorar mi inglés 
						asistiendo a las clases que el gobierno de mi ciudad 
						ofrece de manera gratuita para todos los extranjeros sin 
						importar su condición migratoria. La sede era la 
						biblioteca pública, en unos salones enormes; el lugar 
						estaba completamente abarrotado con hombres y mujeres de 
						todas las razas, edades, culturas y nacionalidades; tuve 
						la sensación extraordinaria de sentirme parte ya no 
						solamente de mi país, sino del mundo entero. Ahí conocí 
						a muchas personas con las que pude desarrollar un lazo 
						amistoso lo cual me ha dado la oportunidad de conocer y 
						entender sus vivencias, pensamientos y percepciones. Fue 
						entonces cuando comprendí que no era la única persona 
						con mi condición, sin importar la nacionalidad ni el 
						género todos habíamos pasado por experiencias más o 
						menos similares Todos éramos migrantes acompañantes con 
						un una historia única grabada tratando de adaptarnos lo 
						más rápido posible a un país que en apariencia se ofrece 
						incluyente. 
						
						
						Al poco tiempo de mi llegada caí en cuenta de que además 
						de ser migrante, me había convertido en una 
						adlátere. Aquí no importaba quién era, ni a qué me 
						dedicaba, si me había desarrollado profesionalmente en 
						mi país, si había estudiado y trabajado o si acaso había 
						obtenido algún  reconocimiento o éxito; en fin, 
						simplemente me había convertido en la acompañante 
						de un inmigrante con una visa de trabajo. Para mi enorme 
						sorpresa el grupo migratorio al que pertenezco no tiene 
						una figura, en los documentos soy la “acompañante de un
						
						no 
						inmigrante”, 
						es decir no existe  un término legal específico. Dado 
						que no hay un reconocimiento de nuestro status y 
						solamente “acompañamos”, me pareció que el término más 
						adecuado para describir esa invisibilidad es adlátere 
						como sinónimo de subordinación y dependencia hacia el 
						otro. 
							
      
            				            					
                		
				            					
									
			
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
					
						
						
						
					
					
					
					
						
					
									
											
												            					
											
											
											
											
            								
                							
												            					
											
											
												            					
											
																	            					
											
												            					
											
											
											
											
											
											
												            					
											
								            					
											
												            					
												
												
												
												
												            					
												
												
												
												
												            					
					
					
					
									
												            					
					
												            					
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								Los adláteres vivimos una situación un poco más 
								azarosa. En el mejor  de los casos se nos asigna 
								un documento que nos permite trabajar; pero 
								aunque muchos de nosotros somos profesionistas 
								calificados en nuestro país, resulta difícil 
								incorporarse a la vida laboral dado que primero 
								hay que entender bien el idioma, entender  la 
								cultura y tocar puertas en donde nadie te ha 
								invitado a pasar. Así nuestro papel queda un 
								poco más relegado a la asistencia en casa, somos 
								el eje incondicional familiar y multifuncional 
								que de manera paradójica conlleva a una rutina 
								impregnada de aislamiento.  
								La migración en los Estados Unidos ha sido 
								ampliamente revisada en la plástica; su eje 
								temático ha sido primordialmente la clase 
								trabajadora, ilegales en la mayoría de los 
								casos, hombres y mujeres que viven en constante 
								lucha por oportunidades e igualdad de derechos. 
								La iconografía en la pintura figurativa tocante 
								al tema migratorio es de carácter épico, 
								histórico y onírico siendo un tema vigente y 
								recurrente en artistas visuales que viven fuera 
								de su país. Sin embargo, me parece por demás 
								interesante tocar otra figura que no ha sido 
								abordada anteriormente y que siempre ha estado 
								ahí con el objetivo de hacerlo visible. El 
								proyecto Adláteres migrantes plantea comunicar 
								la realidad de una comunidad existente 
								resultante del fenómeno migratorio acelerado por 
								condiciones económicas y de oportunidad. Basado 
								en la propia experiencia de personas que 
								pertenecen a este grupo se pretende escudriñar, 
								analizar y sintetizar ideas, así como hacer una 
								descripción de lugares comunes que decantó en la 
								creación de obra con una iconografía particular, 
								símbolos y  rasgos, todo ello aunado al grupo 
								racial y cultural descrito. |  
						Todo lo anterior fue el eje de la exposición “Adláteres 
						and the Unexpected Journey, Works by Carmen Chami” el 
						cual bajo la mirada sensible de la curadora Dolores 
						Mercado recrea al interior de la sala Xhicago del Museo 
						Nacional de Arte Mexicano en Chicago un retrato de lo 
						que es vivir en continuo movimiento y cambio cuando se 
						es un migrante, tomando en este caso el ejemplo de 
						estudio del artista.  
      
            				            					
                		
				            					
									
			
					
					
					
					
					
					
					
						
						
						
					
					
					
					
						
					
									
											
												            					
            								
                							
												            					
					
												            					
						
						Para mí la obra “Adláteres Migrantes/Minions” representa 
						la síntesis de toda esta exploración hecha durante ya 
						poco más de 4 años. 
						
						
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