MAVI ES LA SEMBRADORA DE OTRO TIEMPO DE MÁS

Reseña por Carlos Santibáñez Andonegui

Mavi Robles Castillo cursó la licenciatura en Comunicación en la UABC, es co-fundadora de la Revista de mini ficción Magín y el Colectivo Intransigente. Activista, autora de poemarios como Errabunda y despoblada, Poesía y palabras de viaje desde Colombia. Pero sobre todo es para mí Otro Tiempo de Más. Su nombre está entre poetas del tercer milenio, preparándose a captar todo tipo de audiencias: “Te suplico niña no despreciar ninguna metáfora/ por más común y gastada que te digan que es/no hay nada de cotidianeidad en los atardeceres/ ni en los amaneceres o las olas del océano./ La vida es de algodón como las nubes/ y la Literatura también”. (De Profemas, Poemantras y Aforisíacos, Tijuana, D.F., 2011).

Mavi, dice El Róber Castillo, nuestro Róber de Playas (cfr. Poemas para leerse en una estampida, Editorial Piedra Cuervo, Playas de Rosarito, Baja California, México, 2013) es “grafía visual y sonora, estampida de metáforas, tsunami emocional, tropel de esdrújulas; palabra en vuelo que es pedrada, texto que no sabe del silencio de la página, poema que nació para ser cantado en altavoz, grito; verso como pastillita de menta para el alma, bocanada de humo sagrado…”

A Mavi la van a sentir duro por ahí en los países. Les va a doler la Mavi, lo verá todo el mundo, y la querrán, como yo y tantos poetas de su generación y siguientes, la hemos querido. Pero esto se sabrá después. Por el momento, me llevo a Mavi como de costumbre a cualquiera de mis antologías, y no la suelto así se acabe el mundo. Me la llevo, vean ustedes por qué:

“En lo alto de la montaña el “País” es invisible,/ una fina cortina de partículas secas/ es la retina de la pobreza./ La esperanza es una navaja delgada y filosa/ que traza con su agobio un camino./ Es la calzada a la desolación…// En lo alto de la montaña hay tristeza/ ¿Tristeza dije? -Qué va-, hay mucha tristeza…/ Seres humanos y sin oportunidades/ cuya vida y la de toda su familia vale trece pesos diarios.// …Lo verdaderamente triste de la montaña alta de Guerrero,/es que todo “México” está repleto de esas montañas/ sierras, bosques, desiertos, selvas, cordilleras/ habitados todos por el paisaje del desprecio…” (De: Poemas disueltos, México, 2013).

A ese dolor del México que escribe su nombre con la equis que tiene algo de cruz y de calvario, yo de frente pregunto: ¿Diputados, Senadores, prominentes Señores del alto poder: Qué marca va a tener nuestra inminente Secretaría de Cultura? ¿Será acaso una marca registrada? O si cultura quieren, si se recuerdan de que cultura es lo que queda después de haberlo olvidado todo, aquí está Mavi: “La marca es la herida del hombre capitalista…// La marca, la marca, la marca./ La marca es un acto poético del capitalismo/ Se vienen las marcas y dejan y ya no son marcas./ Son huellas, son cicatrices…”

Porque el poema es lo que está por ser escrito, lo que vendrá, tiene el signo de Mavi para inquirir por ella, por los pueblos, por todos: “Y si este poema es una ofensa nacional/ considérense TODOS ofendidos”.

Yo me la llevo a mi antología en turno, a que me ayude a vender, una vez más, como ayudó en Es Tiempo de Más. Porque sea uno altruista, capitalista o socialista, uno no es nadie si la gente no se lo refrenda, y aún no se inventa otra forma de refrendar que sellar con su preferencia los libros y los poemas que uno quiere. Dejo hablar a mi Mavi: “nunca sabes qué va a pasar. Entonces hay gente que está buscando salvarse, uno es herramienta, cuando hay un nivel de complicidad con la letra y con la palabra, te vuelves una herramienta del lenguaje, el poeta es una herramienta de la poesía, mi compromiso es con la poesía y nada más”.

Eso sí se los digo. Denle juego en la carpa. Dejen que en las orillas de su poesía se correspondan como es debido, belleza y poder. Yo lo suplico en nombre de la poesía, si es que lo valgo. Por esas lágrimas que hemos logrado juntos. Por esas voces que nos vertebran en compañía de inmensas luminosidades como Oralia Rodríguez, Estela, Jonathan Curiel, Alberto Paz. Porque ha estado en mi casa, y lo estuvo siempre y mi casa es su casa es nuestra casa. Porque es ella mi diva quien puede hablar y está totalmente autorizada a revelar en fin mi biografía. Porque en ella está lo único que a un poeta no puede fallar. El corazón. “Podré llorar de felicidad porque te amé/ nos amamos profundamente/ incondicionalmente/ más allá de nuestras diferencias/ nos amamos como los locos/ y correré despavorida hacia la luz/ tu luz/ correré segura, madre/ hacia tu luz,/ porque sé/ ahora/ que al transformarme en lucero/ y regresar a las constelaciones/ entraré en mí/ verdaderamente/ y ahí/ ahí estarás tú/ madre como siempre/ para recibirme”. (De: Va de nuez, Guadalajara-México, 2012).

¡La poesía es explosión, fiesta que ha de quedar!

Sabe que el mundo no nos pertenece y no pertenecemos a él. Pero hemos venido a sembrar una semilla. Por eso su oración es la “Oración intransigente” del Sembrador de Palabras, que destruirá el concepto erróneo de pecado, que hemos admitido, ni siquiera por consigna de alguien sino peor aún: no por iglesia sino por inercia, dejándole de ver como aquello que va contra la verdadera naturaleza del ser humano que es la piedad, para pasar a verlo como una peor amenaza: como aquello que va contra el sistema, que es lo que da más miedo. De ahí que la Sembradora, “surgirá de entre la luz descalza/ y no llevará semillas sólo palabras”.

Les hablará de todo

de muchas formas

tras metáforas y palabras

se ocultará el sembrador de palabras

porque su nombre carece de importancia

porque su rostro no posee expresión

llegará la sembradora de palabras

a fecundar sus vientres con imágenes

su llegada no será anunciada

caerá simplemente

desarrugando su silueta

seduciéndoles

Mavi irá en boca de la gente, mucho más allá de lo que ella imagina, y para muestra vaya un botón de la flor dedicada al poblador o habitante tradicional de las antologías, ese poema escrito al “Narciso exhibiéndose en una Vitrina”, aparecido también en ese título que la gente corregirá con la cita reiterada (la gente cita con más frecuencia de lo que se cree, lo que no es úsese y tírese, usa lo que sabe que es bueno) y es la gente misma quien llevará, oh misterios de la oralidad, a su correspondiente y fatal endecasílabo: Poemas para leerse en estampida:

MAVI ROBLES CASTILLO

POETA DE VITRINA

Deja ahí poeta

déjate ahí

no te manosees

no te toques tus partes poéticas

no te excites tu ego versado

déjate ahí poeta

déjate ahí

acalambra a tu ego

electrocútalo

reprime la venida

acalambra la erección

y déjate ahí poeta

déjate ahí

no niegues la poesía

niégate tú

y que tus imágenes sofoquen la mesa

y que tus abrigos ahoguen micrófonos

y bla bla bla

A diferencia de tantos y tantos vates, nuestra Mavi seguirá cantada, recordada, cuando otros la olviden, precisamente en donde ella no quiere ser recordada: la literatura. Me consuela saber que habrá un estuche de sol, y de alegría, que guardará y respetará su aroma, su deseo de verdad que se junta también con el de muchos y representa a la sociedad. No al erudito ni al especialista que tratan de afianzarse en el bigote de doctores que niegan, para tranquilidad del canon, el poder de hacer poesía de la nueva generación. Sino a quien puede esperar, a quien no le tiene miedo al verbo caducar.

DEL VERBO CADUCAR

Dícese de ti

de la pérdida de eficacia o virtualidad

o dicho de una cosa

arruinarse

acabarse

por antigua y cascada

encanto caducado

reza la fecha de vencimiento

sonrisa que no es más columpio de mis letras

Con un auténtico potencial transgresor, la poesía continuará difundiéndose, festejándose, recitándose, con esa majestad de las cosas reales y que están bien hechas en torno a lo que son: en este caso el valor poético de Mavi que confiesa “Voy bailando con los restos de los nombres” en su:

POEMA UNO, dedicado a Estela: “Estoy loca y Dios habla en mis palabras/ Eligió la locura para mí/

Eligió las palabras para mí/ Eligió la demencia para mí/ Voy adonde todos piensan que no hay nada/El abismo

Mavi transgrede, incluso cuando cree que no, pero a la vez enseña, modifica, sugiere. Es la transgresión hecha poesía que nos abarca a todos:

Haciendo figuras antiestéticas

voy bailando

no camino

voy bailando

voy bailando con los restos de los nombres

voy bailando con las sobras de todas ellas

La hipérbole es una de las figuras más socorridas en esta nueva generación que confía asimismo en el slam para proyectar sus sentimientos y por supuesto, logra efectos poéticos sin ignorar lo que decía Mallarmé, que la poesía se hace con palabras, y entonces, así como decía el proverbio oriental de que todo lo que podemos hacer está encerrado en una vida, en la poesía podríamos decir que todo lo que podemos decir está encerrado en la palabra. El canon ya no puede ser tan exigente y de nada sirve fingir que es hora de ponerse aun más exigente precisamente porque el mundo se está quemando. ¡Abajo payasos! ¡Venga, y haya Mavi por siglos!

2006 fue una mentira,

los años son una mentira,

el tiempo es una mentira

mi cuerpo es una mentira

su cuerpo es una mentira

el autobús que me llevará a la huida será una mentira

la aeronave que me llevará al exilio será una mentira

el sistema métrico decimal es una mentira

el exilio es una mentira

mi parto fue una mentira

el año en que nací fue una mentira

mi exilio será una mentira

mi huida será una mentira

las medidas son la mayor mentira

las pulgadas son una mentira

los pies y los centímetros son una mentira

las medidas del cuerpo son una mentira

medirnos fue la más grande de nuestras mentiras