4.May.2025
MARIPOSA DE MALVAVISCO
de
Sergio Alarcón Beltrán
Desde la raíz a las pupilas,
el arcoíris de tus rizos,
colorea, el mundo.
La sonrisa de la jacaranda,
fiesta concurrida con la buganvilia,
los campos de luciérnagas
y la juguetería de los astros
que danzan jubilosos.
Un coro de aves en las ramas,
te ve pasar, luciendo la ternura
de tus pétalos, el crepé de tus alas
revestidas del rocío que abre,
el concierto de la fantasia.
¡Oh, párvula mariposa!
Algarabía en el carrusel
de tu mirada, en la fiesta
patronal de tu latido.
Algodones de azúcar,
tus ojos musicales,
coronan tu sonrisa.
En la rueda de la fortuna,
cúspide, preciosa niña envuelta
en la ternura del rebozo
que custodia tu alegría.
Doncella en flor,
tus pétalos de sol, ungen,
la muchedumbre de la imaginación,
juegan a inventar la lluvia,
el sol que da vida,
al arcoiris de la niñez,
a la explosión de los sabores
en las papilas del banquete.
Mariposa de malvavisco,
el bosque de tus ojos neuronales,
colorea, la estación floral,
la cometa que acaricia tus palabras,
las estrellas de gelatina que tiritan,
el cielo de las constelaciones.
En el alcázar de la imaginación,
el elixir de las flores sueña,
el aleteo del silencio,
la brisa de las palabras.
De ágata realeza,
la catarina, derrama,
la dulce sonrisa de Dios
en las cerezas de tu rostro.
El coro del quetzal y el jilguero,
ofrenda de flan napolitano,
tus labios que amanecen,
jugueteando, con el sabor
y el almíbar de los postres
que se hornean en el árbol.
Del arcoiris, un desfile
de alebrijes y hadas, irrumpe.
Hogwarts, el latido de tu corazón.
Materna casa de la imaginación.
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