21.Febrero.18
Cristina de la Concha
Poema aporreado
Entre aquellos
seres de maldad
uno en particular
poder tal desplegaba
que nadie forma tenía
de resistirse y subsistir
con placeres
y amores falsos
seducía a incautos
y todos un porro
y porritos fumaban
haciéndole los favores
a que obligaba
pues no podían, sufrientes,
menos que aceptar
pues
bajo seducción
ignoraban quién el hiriente
indignada la ella aquella
indagaba y con ahínco
se esmeraba para
entre premisas cuántas
dilucidar cuál
el origen que a tal ser
un
mal tal
empoderado lo tenía
que ni la Luz
traspasaba su negrura
y a su oscura negritud
que a perdón y amor
armas letales a toda maldad
floreteaba en el aire
ah, si bien tardó
no mucho fue el tiempo
en que supo
que esos males
de otro poder procedían
y en lejanas tierras halló
al príncipe de blanco
con cuyo pacto
no fallara el blanco
quien el pregón le obsequió
e hipocresía de paz y amor
tósigo
hendía en los pobladores
y labor de luz
la ella aquella
a toda
prisa celebró
que urgente era
desbaratar pacto
y saña con que
fumar porro
y porritos
los pobladores
se lastimaban
y aquel ser
de los más malévolos
de esta historia
que a Dios creerse
incluso llegó
no tuvo
más remedio
que a lo
común ceñirse
si bien
ni hipocresías
ni
falacias abandonó
cristinadelaconcha@hotmail.com
https://www.facebook.com/cristina.delaconchaortiz
|